En el año 1999, la cantante islandesa Björk lanzaba su album Homogenic. De una de sus canciones, All is full of love, realizó una estupenda versión para su album Greatest Hits. Con ella el video-artista británico Chris Cunningham conformó una delicada master piece en la que conviven con elegancia lo blanco y lo negro, las cuerdas y la electrónica, la fluorescencia y la sensualidad de porcelana de unas máquinas que despiertan al amor, que lo impregna todo.
Globalización, capitalismo y otros resortes de poder (76) El turismo
mundial se acerca a un nuevo récord mientras crecen las protestas por la
masificación
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*Miles de millones de personas viajaron durante sus vacaciones de 2023,
retomando los niveles anteriores a la pandemia. Y en las próximas décadas,
se pre...
Hace 3 meses